Usualmente, cuando vamos a una entrevista de trabajo, solemos pretender ser perfectos, Y nadie quiere que sus defectos, debilidades o amarguras salgan a la luz, pues se sabe de antemano que ante un mínimo detalle que no sea del gusto, análisis o bien del instinto del reclutador, puede afectar todo el proceso de contratación.
Es muy usual que una mala referencia crediticia, laboral o historial de mal comportamiento o bien rebeldía, sea tomada como inadecuada o bien un potencial peligro en tu nuevo trabajo, por lo que, el reclutador deberá analizar a través de pruebas psicométricas, de aptitud o de inteligencia, lo que realmente hay dentro de tu ser, pudiendo finalizar las mismas con pruebas de poligrafía e investigación socioeconómica, para asegurarse que el candidato que presenta es una persona que vale la pena tener en el equipo y que cuenta con las características, cultura, aptitudes o bien competencias requeridas en la empresa.
Y si lo pensamos bien, el reclutador, la empresa reclutadora o bien la empresa que directamente realiza la contratación está en su derecho de evaluarte al derecho y al revés porque de ahora en más serás un integrante que representará la entidad que con tanto esfuerzo se ha construido. (Esto sin por ello ahondar en que la empresa deberá contar con un plan estratégico o bien operativo como mínimo, el clima de la empresa, rotación de su personal, y trato hacia el colaborador, situación que debiera ser un 50/50, de manera que tanto ellos sepan que realmente tienen un colaborador comprometido con el equipo, que es capaz de ser leal y positivo, además brindar resultados; y que tu sepas que son una empresa en la que vale la pena trabajar y por supuesto brindar la mayor cantidad de tu tiempo, energías y capacidad al máximo, para, de igual manera, brindar resultados que serán tanto de beneficio para ellos como para ti).
Pero ¿qué sucede cuando durante el proceso de entrevistas, el reclutador o empresario no está capacitado, interesado o atento a la entrevista que sucede en ese mismo momento? ¿qué pasa si dentro de sus preguntas, hace comentarios discriminatorios? Obviamente el resultado será que tu no aprobarás el proceso, pues el tiene la capacidad de decidir o informar que X candidato no estaba apto al puesto. (Tema que dependerá mucho del compromiso del reclutador y su ética laboral, así como su compromiso ante la labor que realiza).
En dos ocasiones recuerdo que participé de entrevista laboral y me topé con esto: la primera vez en X empresa, el dueño de la misma, extranjero pero quien hablaba claramente el idioma español, comenzó la entrevista; pero para ello, tenía a todo su equipo de confianza alrededor (su secretaria, su chofer, y dos hombres más que no tengo idea quiénes eran), todos observándome con un block de notas sobre la mesa y analizándome al mismo tiempo. Aunque fue incómodo, yo estaba dispuesta a aprobar la entrevista, así que, con mucho positivismo continué. Al instante me sirvieron un desayuno, huevos revueltos, frijoles, tortillas y café, situación que encontré muy agradable pero incómoda al mismo tiempo nuevamente, pues a nadie más le sirvieron comida, y el entrevistador, o sea el dueño, insistía una y otra vez respecto a que comiera, que debía comer, que era muy necesario que comiera.
Luego de una charla sin sentido, la entrevista se desarrolló a pausas, donde todos tenían autorización a cuestionarme acerca de lo que quisieran; era claro que el dueño de la empresa, había dado su permiso a todos para hacer consultas sobre lo que se considerara conveniente.
Pero en uno de tantos cuestionamientos, el dueño de la empresa me dice: "¿usted vive sola?, ¿vive con sus padres? ¿tiene hijos?", y le respondí muy sinceramente, haciéndole referencia que no tenía hijos y que vivía con mi madre. Acto seguido me pregunta: "¿y su papá?", y yo le respondo que si tenía relación con él, pero que mis padres se habían divorciado hacía más de veinte años.
De forma inmediata su semblante cambia y comienza a observarme con ojos de escrutinio, de querer saber más.
En fin, la entrevista continuó de forma muy errática para que al final me dijera: "pero contratarte a ti sería malo, negativo, porque creciste sin padre, y eso es una cadena que sigue y sigue...", y mientras seguía diciendo cosas entre dientes que no entendí, así que terminé la entrevista lo más pronto que pude y salí de ahí pensando que el hombre se había pasado de la raya, que no tenía derecho a criticar mi vida y mi pasado y mucho menos juzgarme por algo que no estuvo en mis manos, o bien algo que era muy íntimo de mi familia y que nosotros sabíamos con lo que se había lidiado y cómo habíamos salido de algo que en algún momento fue malo o triste. Aunado a que eso no me definía como persona.
La segunda ocasión, tuve una entrevista entre las fechas de navidad y año nuevo, a través, precisamente de una reclutadora Las personas que conformaban la reclutadora se portaron como unas totales divinuras, eran amables, se tomaron el tiempo para evaluarme, entrevistarme dos veces, y completar documentación requerida, haciendo la observación negativa que antes que el dueño de la empresa me entrevistara, ellos averiguaron referencias laborales, incluido me trabajo actual en ese momento.
Uno de esos días, antes de navidad, me llama la reclutadora y me indica que tendría entrevista la semana después de Navidad, y que debía llegar muy puntual, mejor si llegaba una hora antes, brindando también etiqueta para vestimenta y el comportamiento que se esperaba de mi. Me amplió un poco la información acerca del dueño de la empresa y su carácter, además de otros "tips", que podrían ayudarme a conseguir el trabajo.
Nuevamente, llego una hora antes de lo estipulado, llevo un CV de respaldo en caso que no cuente con él a la mano, entro a la empresa y pregunto por mi entrevistador. Por ser la semana después de Navidad, la secretaria del dueño (el entrevistador), no estaba, nadie del área de ventas sabía que yo llegaría y me indicaron que el dueño se había retirado desde muy temprano y que nadie contaba con su número para contactarle.
Logré contacto a través de mi reclutadora, quien le ubicó y le recordó que tenía entrevista. Mi entrevistador llegó molesto, con cara de pocos amigos unas dos horas más tarde de la hora pactada, no llevaba mi información ni había leído nada acerca de mi. Me pasó adelante en un gran salón y mientras ubicaba mi información de forma errática en su máquina, comenzó a hacerme preguntas de forma intermitente y sin sentido. Quería respuestas de una o dos palabras, mientras no me daba la cara y se la pasó viendo su computadora durante más de una hora. Durante la entrevista le llamaron por teléfono y al final agradeció mi presencia e indicó que debía pasar por una entrevista más, la de su esposa. Misma a la cual nunca se obtuvo respuesta.
¿Por qué lo publico? Lo hago para que no te desanimes. Es usual encontrar lo que es correcto y debes hacer durante la entrevista, lo que se espera de ti, lo que debes hacer bien, cómo debes hacerlo, cómo debes presentar un CV, qué información es correcta o bien cómo deberás vestir y actuar. Pero en pocas ocasiones nos criticamos u objetamos como reclutadores, entrevistadores o dueños de empresa.
Para los candidatos, siempre sé tu mismo, claro está, comportándote como es esperado según el puesto al que apliques, siempre da más de lo esperado y no creas que ya eres dueño del puesto, todo lleva un tiempo y seguimiento. Toma los tips que se te brindan y conviértelos en tu mejor arma. Una vez adquirido tu puesto recuerda, todo tu tiempo laboral es una referencia o recomendación de tus labores y lo que sabes, así que ni por un minuto pienses en bajar tu nivel y tus motivantes.
Para los reclutadores, entrevistadores o dueños de empresa, siempre prepárate para recibir a tus candidatos, recuerda que aun por necesidad de laborar y el tema económico, quieren ingresar a tu empresa y la están considerando una opción. Sé educado y amable. Deja tu teléfono de lado al menos durante media hora y presta toda tu atención a quién entrevistas, pues esta persona representará a tu empresa. No tengas personas adicionales que no necesitan estar en el salón a menos que sea requerido por la empresa y verifica que sean personas que saben lo que están haciendo. Ahh, y al menos lee la información que se te brinda, de manera que el candidato sepa que te tomaste la molestia de saber acerca de él/ella, agendando la fecha y hora en que la entrevista tendrá lugar.